600 g de solomillo de ternera.
1 Yema de huevo cruda.
30 g de cebolla tierna.
30 g de pepinillos en vinagre.
30 g de alcaparras.
1 diente de ajo.
Unas gotas de Brandy.
Unas gotas de salsa Perrins.
1 Cucharada de cebollino picado (o de perejil).
Una pizca de sal en escamas.
2 Cucharadas de aceite de oliva.
Sal.
Pimienta.
PREPARACIÓN:
Limpiamos el solomillo de impurezas y lo picamos o podemos comprarla ya picada. Picamos de la misma forma y por separado la cebolla, los pepinillos y las alcaparras. Frotar con el diente de ajo el recipiente donde se vaya a elaborar el tartar, rociamos la base con un chorrito de aceite de oliva. Colocamos abundante hielo dentro de un bol grande y disponemos encima el recipiente frotado con el ajo. Introducimos la carne y formamos un hueco en el centro donde agregamos la yema de huevo y una pizca de sal y pimienta. Mezclamos bien hasta que todo esté integrado. Añadimos la picada de pepinillos, cebolla y alcaparras, la salsa Perrins y el brany, poco a poco hasta dar con el sabor deseado. Rectificamos de sal y pimienta. Distribuir el tartar en platos individuales, utilizando un molde para darle una forma redonda o como se desee, espolvoreamos con el cebollino recortado con tijeras y una pizca de sal en escamas. Se puede servir también con la yema de huevo en el centro. Esté plato nos llevara unos 20 minutos. NOTA: La carne picada debe conservarse en el frigorífico, y consumirse lo antes posible ya que el riesgo de contaminación es muy elevado. Este plato tiene su origen en los tártaros, nómadas de Asia central que por no tener tiempo a cocinar metían la carne debajo de las sillas de montar y a la noche tenían la carne macerada y tierna para comer. Servir con un vino tinto joven. Desde Santiago de Compostela.
1 comentario:
A mi marido le salía muy bien,pero a mi la carne cruda...pues no me gusta.
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