500 g de fresas.
100 g de harina.
200 g de mantequilla.
6 huevos.
750 ml de leche.
300 g de azúcar.
PREPARACIÓN:
Separamos las yemas de las claras y reservamos.
Por otro lado, untamos un molde grande con mantequilla previamente ablandada. A continuación espolvoreamos con un poco de azúcar. Seguidamente mezclamos el azúcar con las yemas y batimos bien, para que nos adquiera volumen.
Agregamos la harina y la mantequilla fundida. Mezclamos y por último incorporamos la leche caliente, movemos bien y dejamos que repose la masa resultante hasta que enfríe.
Vamos montando las claras a punto de nieve y cuando están muy consistentes, las mezclamos con la masa anterior.
Empezamos a rellenar el molde y colocamos masa en la base, agregamos fresas, de nuevo masa, de nuevo fresas y por último masa.
Metemos el molde al horno ya precalentado a unos 175ºC y lo dejamos unos 6 minutos. La masa ha de suflar, es decir tomar volumen y ha de estar doradita.
Comemos en caliente ya que si no, el sufflé perderá volumen.
Se puede adornar con fresas cortadas y con un poco de nata montada.
Este rico postre nos llevará unos 45 minutos. Desde Santiago de Compostela.
2 comentarios:
Eso d que la dificultad sea alta no será problema cuando el resultado asoma como tu fotografía. Las fresas son un lujo de frutas, decoran y saben deliciosas y son una excelente combinación... Saludos.
El suflé me encanta, y las fresas son unas de mis frutas preferidas.
El problema en Costa Rica es que para tener fresas rebosantes de tamaño, usan demasiados herbicidas, que hacen que esa fruta sea casi tóxica.
Saludos
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